No hay duda de ello, los gatos son grandes mascotas. Después de todo, ¿qué hay mejor que volver a casa al final de un duro día y escuchar el ronroneo de satisfacción de una adorable bola de pelo?
Los estudios demuestran que las personas con animales de compañía suelen estar más sanas y felices que aquellas que no los tienen, pero recuerda que tener un gato es una gran responsabilidad y un compromiso de por vida. Cuando estés listo para asumir este compromiso, comprobarás que tener un gato ofrece ventajas como las siguientes:
Se ha comprobado que tener un gato reduce el estrés.
Normalmente los dueños de gatos tienen una tensión arterial más baja que las personas sin mascotas.
Puedes beneficiarte de un sistema inmunológico más fuerte y recuperarte de las enfermedades antes que las personas que no tienen animales de compañía.
Por lo general, los niños que crecen con gatos tienen menos días de enfermedad que aquellos que no tienen mascotas.
Los gatos son muy cariñosos y tienen un gran carácter, pero también valoramos su independencia, es decir, necesitan menos cuidados que otras mascotas.
Los gatos pueden ayudar a las personas a recuperarse más rápido de un trauma emocional, como el fallecimiento de un ser querido.
Tener un gato es muy beneficioso, pero es importante elegirlo detenidamente para estar seguro de que te adaptarás bien a tu esponjoso amigo. Tu gato ideal dependerá de tu estilo de vida y de tus preferencias personales. Por ejemplo, es posible que quieras un gato adulto al que poder acariciar en tu regazo o que tengas en mente un gatito de una raza especial.